Siguiendo con un escritor muy parecido y al mismo tiempo muy distinto de Sôseki, hoy os hablaremos de Mori Ôgai (1862-1922).El otro gran escritor del periodo Meiji.
Lo
más interesante acerca de la producción de Mori Ôgai es sin duda la gran
variedad de corrientes de las que hizo uso a lo largo de su carrera, sin llegar a adscribirse a ninguna.
Poco tiene que ver su primera novela reconocida, La bailarina (Maihime, 舞姫), una
novela romántica, de estilo pseudo-clásico, con las biografías de médicos
samuráis que supusieron la parte final de su carrera. Estas últimas, a caballo entre la
novela y la crónica, suponen prácticamente un género en sí mismas, que, como se
puede suponer, nació y murió con este
autor. Entre sus obras encontramos ejemplos de romanticismo, naturalismo y novela histórica, lo cual, cuando menos, convierte a Ôgai en un novelista lleno de versatilidad y capacidad de renovación. Las dos obras con las que contamos en la biblioteca, por ejemplo, sirven muy bien para ilustrar cuán distintos pueden ser sus libros unos de otros.
Por su parte, la temática de El intendente Sansho (Sanshô Dayû, 山椒大夫) no podía estar más alejada de las experiencias personales de un estudiante de medicina. En este cuento, dos hermanos de clase alta son capturados, separados de su madre y convertidos en esclavos. Para quien tenga interés en este tipo de cine japonés, Kenji Mizoguchi realizó con el mismo título una estupenda versión de esta historia, estrenada en 1954. El volumen incluye otros relatos históricos, como el de Takasebune (高瀬舟), en el que un hombre ha sido condenado al destierro por haber ayudado a su hermano a morir. Posiblemente sea esta la primera obra de la literatura japonesa moderna en la que se trata la eutanasia.
Obras disponibles en la biblioteca: El intendente Sansho (Editorial Contraseña, incluye El intendente Sansho, El barco del río Takase, Las últimas palabras, Sakazuki, La señora Yasui, La historia de Iori y Run), Vita sexualis (Trotta editorial).
Así pues, venid, ¡coged un libro y juzgad su mérito por vosotros mismos!
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